martes, 7 de julio de 2009
LA SONRISA EN VALENCIA SE SIRVE FRÍA
El Juez ve indicios suficientes de cohecho en Camps y en otros altos cargos del Gobierno Valenciano. No admite el auto que alguien diga que es poca la cuantía de la dádiva, incluso ridícula, dada la dignidad de las personas obsequiadas, pues es grande “el desvalor de su acción”, se lee del juez José Flors. El TSJV no archiva, pues, la causa, no la sobresee. Esta acción obsequiosa de “poca cosa” parece estar hecha con el mismo celuloide, que lo fue el “hampa dorada”. Visten trajes, americanas, pantalones, esmoquin, frac, apropiados para asistir a FITUR, las TVC, EXPOVACACIONES, SITC, INTUR. Si la facturación de la sastrería pudiera sumar los 82.595’28 €, los contratos “de muy variado objeto adjudicados por diferentes organismos de la Administración de la Generalitat Valenciana a la trama”, durante los años 2005 a mayo de 2009, suponen cantidad no inferior a los 6.917.380’06 €: son parte del alijo de negocios, cuyos rastros se encuentran también en la embarcación de recreo que usaba la trama. La barca “parapipi”. Rita Barberá prueba la sonrisa de los imputados y percibe que en Valencia la sonrisa del PP, como el agua de Valencia, se sirve fría.
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Como he dicho en el blog de Felipe, la noticia me alegra, pero no tengo demasiada confianza en el resultado. Ya lo disfrazarán todo como sea para que salga impune... Será por trajes...
ResponderEliminarUn saludo.