La reciente conmoción es que los Estados se espían. Es una práctica antigua. Al menos va pareja a la pretensión del monopolio del poder. Con los Estados, nacieron las Agencias de Inteligencia. Ahora se me escapa el escándalo. En los aledaños de casa, la de un modesto servidor público, se instalaron escuchas. Siguieron mis reuniones, encuentros, salidas y conversaciones con amistades. Siempre supuse que era para, en su caso, chantajearme. No fui, para su disgusto, lo suficientemente importante. Ahora quiero que publiquen no la existencia de espías, sino sus conclusiones. Me temo que las conversaciones grabadas no pasan de asuntos de cartera y/o bragueta. Mejor el cine.
domingo, 27 de octubre de 2013
domingo, 13 de octubre de 2013
Nace un planeta de nuevo y un nieto
Nada hay más admirable que las estrellas y la conciencia. Hoy, junto a nostros, ha nacido un niño, a quien llamaremos Luis. Trajo a mi ánimo la admiración del Universo. Ha sido el cuarto nieto. Por él, he venido a confirmar que la principal nostalgia es la del porvenir. Con él se renueva la familia y el Universo. En él repongo mi admiración del mundo.
planeta nuevo |
Hasta ahora, la formación planetaria ha sido un asunto abordado principalmente con simulaciones por ordenador” afirma Sascha Quanz. “Si nuestro descubrimiento es ciertamente un planeta en formación, por primera vez los científicos podrán estudiar de forma empírica el proceso de formación planetaria y la interacción de un planeta en formación con su entorno natal en un estadio muy temprano”.
Lá Física está de enhorabuena: contemplan en directo el nacimiento de un planeta.
Nosotros hemos visto en directo el nacimiento de una nueva conciencia. Con la admración, renace la esperanza de un mundo nuevo, respetado y cuidado, como nosotros cuidaremos a este mi nieto recién nacido, a los anteriores y a los que aún están por llegar.
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conciencia,
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domingo, 6 de octubre de 2013
Lampedusa y otros
Vivos no Muertos |
Las fronteras son el juego de los Estados, ¡Alto, Fuera! Gritan a inmigrantes y gitanos. Mientras, por otras redes, pasan y repasan, vuelven y revuelven operaciones comerciales, que habrían de ser la sal de la vida, suya y de la de sus empleados. Muchas personas mueren en el intento. Los Estados no lloran por los sin-Estado.
viernes, 4 de octubre de 2013
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